SM el Rey recibe al Wali de Bank Al Maghrib
SM el Rey Mohammed VI recibió, hoy miércoles en el Palacio Real de Rabat, a Abdellatif Jouahri, Wali de Bank Al-Maghrib, quien presentó al Soberano el informe anual del Banco Central sobre la situación económica, monetaria y financiera a título del año 2012.
En su alocución delante de SM el Rey, Jouahri indicó que la economía nacional ha realizado en 2012 un crecimiento del 2,7%, en un contexto caracterizado por una coyuntura internacional difícil juntada a unas condiciones climáticas internas desfavorables.
Así, explicó que el crecimiento esencialmente ha sido cumplido gracias a la realización del sector de servicios y la mejora relativa de la demanda interior, a una política presupuestaria expansionista y a una evolución moderada de la inflación. En cuanto a esta última, señaló que la tasa de inflación se ha limitado a 1,3% a pesar de la subida de las tarifas de los carburantes en junio de 2012.
Evocando el mercado laboral, precisó que la tasa de desempleo se ha estabilizado en el 9% a pesar de una creación neta de empleo casi nula.
Jouahri subrayó que 2012 fue un año difícil a nivel de las finanzas públicas y las cuentas exteriores. En efecto, el déficit presupuestario registró una acentuación de su tendencia alcista para establecerse al 7,6% del PIB, debido a la progresión de los gastos, particularmente los relativos a la compensación. En paralelo, la cuenta corriente de la balanza de pagos registró una nueva degradación, a causa de la elevación de su déficit al 10% del PIB, ocasionando así una contracción de las reservas de cambio.
En lo referente a la política monetaria, Jouahri explicó que, en un contexto de ausencia de tensiones inflacionistas y de disminución de la actividad económica y del crédito bancario, Bank Al Maghrib ha proseguido su política monetaria condescendiente, marcada en particular por la disminución del tipo director al 3% y de la tasa de la reserva monetaria al 4%, adaptando el volumen de sus intervenciones a las necesidades del mercado en términos de liquidez.
El Banco Central también reforzó las reglas prudenciales aplicables al sector bancario nacional, en la línea de las exigencias de las normas internacionales, agregó.
Asimismo, Wali de Bank Al Maghrib afirmó que a pesar de la coyuntura económica difícil, Marruecos ha seguido gozando de la confianza de sus socios y de los inversores internacionales, como lo demuestran la firma del acuerdo relativo a la línea de precaución y de liquidez con el FMI y las condiciones ventajosas de las dos últimas emisiones del Tesoro en el mercado internacional.
Eso, afirmó Jouahri, es fruto de las iniciativas políticas y de las reformas institucionales lanzadas por SM el Rey, consolidadas en 2011 por la revisión de la constitución, que consagró la elección democrática de Marruecos.
Hacer frente a los desafíos que afronta nuestro país hoy, subrayó, pasa por la aceleración y la ampliación de las reformas en el marco de la aplicación de la constitución y de la terminación de los proyectos estructurantes emprendidos en los últimos años.
Es también imperativo, destaca el Wali de Bank Al Maghrib, restablecer los equilibrios macroeconómicos y asegurar la viabilidad de las finanzas públicas, que requieren especialmente la revisión de la política de las subvenciones, así como la reforma de los sistemas de jubilación, del sistema fiscal y de la ley orgánica de las finanzas.
En este marco, afirmó que los logros políticos que Marruecos registró en un contexto regional inestable, que fueron ampliamente saludados a escala internacional, necesitan, para su preservación y su fortalecimiento, unos avances económicos tangibles capaces de hacer mejorar los niveles de vida de una población que se movilizó detrás de SM el Rey para el éxito de las reformas políticas que el Soberano ha querido para nuestro país.
A este fin, Jouahri subrayó la necesidad, especialmente en la coyuntura actual, que el conjunto de los actores se movilice para el interés supremo de la nación.
Para concluir, el Wali de Bank Al Maghrib afirmó que el Banco Central no escatima ningún esfuerzo para contribuir al éxito de estos proyectos, particularmente asegurando la financiación adecuada de la economía, sobre todo en favor de las muy pequeñas, pequeñas y medianas empresas y mejorando el acceso a los servicios financieros, así como su calidad.