Discursos Reales

Su Majestad el Rey Mohammed VI dirige un discurso al Foro Mundial de Lucha contra el Terrorismo en Nueva York

Su Majestad el Rey Mohammed VI dirigió hoy martes un discurso al Foro Mundial de Lucha contra el Terrorismo en Nueva York, cuya lectura ha sido dada por el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Salaheddine Mezouar.
He aquí el texto íntegro del discurso Real:
 
"Loor a Dios, La oración y el saludo sean sobre nuestro señor Enviado de Dios, su familia y compañeros.
 
Excelentísimo Señor Don Barack Obama, Presidente de los Estados Unidos de América,
Majestades, Altezas, Excelencias,
Señoras y Señores,
 
En primer lugar, me complace poner de relieve la iniciativa de Vuestra Excelencia, Señor Presidente, de convocar esta Cumbre, que viene a reforzar la fuerte dinámica lanzada por la Cumbre celebrada en la Casa Blanca, en febrero pasado, con el fin de combatir el extremismo y el terrorismo.
Por otra parte, dicha iniciativa viene a reflejar la creciente toma de conciencia de la comunidad internacional con respecto a la gravedad de la situación y la necesaria conjunción de los esfuerzos para hacer frente a las continuas amenazas terroristas.
En este sentido, quisiera asegurarle que Marruecos, que ha participado en el proceso fundador de la Cumbre de Washington, va a continuar su apoyo a los objetivos y recomendaciones resultantes de esta última, así como contribuirá a los esfuerzos internacionales que buscan consolidar la seguridad y estabilidad a través del mundo, defendiendo los valores humanos universales.
Señoras y Señores,
A pesar de las múltiples iniciativas y respuestas presentadas por la comunidad internacional, que también abarcan las operaciones militares y securitarias, numerosos países siguen todavía expuestos a los dolorosos ataques del execrable terrorismo, que no conoce religión ni patria.
Las bandas extremistas y grupos terroristas siguen con sus viles operaciones, asesinando a inocentes, destruyendo estructuras económicas y derribando seculares símbolos y manifestaciones de la civilización humana.
También atentan contra la integridad territorial de los Estados y desestabilizan la seguridad y sosiego de las personas y pueblos, destruyendo los vínculos sociales y culturales, así como los valores humanos que los unen.
La inquietante propagación de esta lacra mundial nos interpela a todos y nos invita a llevar a cabo una mayor coordinación y cooperación, así como una optimización de los recursos disponibles, a fin de lograr una movilidad de mayor eficiencia y efectividad.
Las dimensiones securitaria, militar y judicial, jugarán un papel importante en la lucha contra el extremismo y el terrorismo, aunque las mismas deben ser completadas.
Por ello se hace necesario materializar una estrategia integrada que abarque también la promoción del aspecto social y de desarrollo, amén del importante papel de la dimensión educativa y religiosa en la difusión de la cultura de la tolerancia y moderación.
Señoras y Señores,
El enfoque adoptado en el ámbito de la lucha contra el extremismo y el terrorismo debe basarse en unos partenariados de verdadera cooperación y lealtad a los compromisos.
He aquí una responsabilidad social que de ningún modo debe someterse a estrechos cálculos y pujas, ni ser objeto de enfoques condescendientes.
Desde este ángulo, la lucha contra esta lacra debe partir de la existencia de una fuerte voluntad colectiva y basarse sobre la coordinación y cooperación bilateral y regional, con el fin de llevar a cabo operaciones sobre el terreno, amén de la existencia de una complementariedad e integración de las estrategias nacionales.
La batalla que todos estamos llevando a cabo contra el extremismo y el terrorismo debe ser sólida y profunda, para que las organizaciones políticas, económicas y sociales se granjeen la confianza y apoyo de sus ciudadanos, protegiéndoles contra las falsas ilusiones que les presentan las ideologías extremistas.
Conviene, igualmente, rehabilitar el papel de los valores religiosos, espirituales, culturales y humanos, ya que éstos constituyen el mejor medio para desbaratar los falsos argumentos y las embaucadoras justificaciones que los extremistas esgrimen a la hora de justificar sus actos bárbaros.
En este sentido, el gran reto que se erige ante la lucha contra el extremismo y terrorismo, debe estribar en la convicción mutua de que esta lacra mundial no debe asociarse a ninguna religión, cultura o civilización.
Los esfuerzos internacionales han de fundarse sobre la igualdad y el mutuo respeto de las identidades, especificidades culturales, creencias religiosas y valores espirituales de todos los pueblos, indistintamente.
Nuestro combate contra el extremismo ha de basarse, igualmente, en el objetivo de dotar a los jóvenes y mujeres de una educación abierta, que se inspire de los auténticos valores y referentes de sus sociedades, asumiendo a la vez los valores universales, a fin de salvaguardarlos del extremismo y ostracismo. 
Asimismo, se ha de velar por la realización de los objetivos del desarrollo sostenible, que conjuntamente hemos establecido y acordado, en la medida en que garantizan una vida mejor para los ciudadanos, sentando las bases de un mundo más estable.
 
Señoras y Señores,
 
Marruecos ha adoptado una estrategia global que concilia las acciones preventivas, que buscan luchar contra los factores que conducen al extremismo, con los imperativos de preservación de la seguridad y estabilidad.
Merced a la coordinación y cooperación entre los diferentes servicios de seguridad nacional, así como al afianzamiento y modernización de su arsenal jurídico, Marruecos ha conseguido hallar respuestas adecuadas a las amenazas terroristas que conocen un acelerado desarrollo.
Asimismo, somos conscientes de que la lucha contra el terrorismo y el extremismo, ha de adoptar un enfoque participativo y preventivo, basado en la adhesión de los ciudadanos a los esfuerzos y medidas tomadas por las instituciones del Estado.
En este sentido, Marruecos vela por intensificar la cooperación securitaria que tiene establecida con numerosos países, con el fin de hacer frente a las diferentes manifestaciones de las amenazas terroristas.
Siguiendo sobre la vía de la cooperación solidaria, Marruecos está dispuesto a compartir su experiencia con todos los países hermanos y amigos, así como ofrecerles los programas que ha desarrollado en el ámbito de la promoción de los tolerantes valores islámicos y de la apertura sobre las demás religiones, culturas y civilizaciones.
Señoras y Señores,
El Foro Mundial de Lucha contra el Terrorismo (GCTF), que se reafirma como espacio para el diálogo y el intercambio de experiencias y buenas prácticas, continúa desplegando sus esfuerzos de anticipación con el fin de apoyar las medidas tomadas por los Estados.
Marruecos, que comparte con los Países Bajos la presidencia de este Grupo de Trabajo emanado del presente Foro, se emplea profundamente en propagar y sacar provecho de las buenas prácticas contenidas en el Memorándum de La Haya-Marraquech.
Se trata, sobre todo, de hallar respuestas eficientes al fenómeno de los combatientes terroristas extranjeros, así como llevar a cabo un profundo análisis de las tendencias y orientaciones terroristas que conocen un constante desarrollo. 
El presente Foro sigue profundizando la investigación y el estudio de las diferentes cuestiones relativas a la prevención y lucha contra el extremismo y terrorismo, especialmente a través del desarrollo de modalidades prácticas susceptibles de favorecer el intercambio de experiencias y reforzar las capacidades de los Estados en esta materia.
Marruecos que tendrá el honor de copresidir este Foro en 2016,  no escatimará esfuerzo alguno en consolidar su contribución y continuar su adhesión a los esfuerzos internacionales de lucha contra el extremismo y terrorismo, en aras de un mundo más seguro y estable, fuertemente solidario y humano. 
La oración, el saludo y la bendición de Dios, sean con vosotros."