Discursos Reales

SM el Rey dirige un mensaje a la 42 cumbre ordinaria de la CEDEAO

Su Majestad el Rey Mohammed VI dirigió un mensaje a la 42 cumbre ordinaria de los Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO), cuyos trabajos arrancaron hoy miércoles en Yamusukro, en el centro de Costa de Marfil.


""Loor a Dios, la oración y el saludo sean sobre nuestro señor Enviado de Dios, su familia y compañeros.

Excelentísimo Señor Presidente Alassane Ouattara, Presidente en ejercicio de la Conferencia de Jefes de Estado y de Gobierno de la CEDEAO,


Sus Excelencias Señora y Señores Jefes de Estado y de Gobierno,


Señor Don Kadré Désiré Ouédraogo, Presidente de la Comisión de la CEDEAO


Excelencias, Señoras y Señores,


Me es particularmente grato dirigirme a la presente Sesión Ordinaria de los Jefes de Estado y de Gobierno de la CEDEAO, que se celebra en Yamusukro, en esta tierra de Còte d´Ivoire, que tanto cariño le guardan los marroquíes.


Les deseo pleno éxito en sus importantes trabajos, alegrándome mucho por esta nueva oportunidad que se me brinda para compartir con Ustedes, muy queridos Hermanos, algunas ideas, observaciones y sugerencias.


Señor Presidente,


Excelencias, Señoras y Señores,


Encarecidamente quisiera subrayar la importancia estratégica que el Reino de Marruecos otorga a sus relaciones prioritarias con la CEDEAO y todos sus Estados miembros. Son relaciones marcadas sobre todo por una historia secular, llena de múltiples intercambios, lazos sanguíneos y compartidos valores culturales y espirituales; unas relaciones institucionalizadas y consolidadas tras recuperar nuestras independencias.


He aquí unas relaciones arraigadas, ampliadas y enriquecidas, a lo largo de estos últimos años, por una solidaridad ejemplar y una singular cooperación Sur-Sur, al servicio de nuestros pueblos.


Desde mi accesión al Trono de Mis Gloriosos Antepasados, no dejo de otorgar un interés muy particular a este eje fundamental de las relaciones exteriores del Reino, así como a la filosofía específica que lo inspira y a las realizaciones en materia de desarrollo humano que lo marcan.


A día de hoy, y gracias a esta acción concertada y compartida, miles de estudiantes de la región de África del Oeste, de ambos sexos, becados por el Estado marroquí, siguen sus estudios académicos en las universidades y escuelas superiores marroquíes, en el mismo momento en el que se profundizan programas de aprendizaje y formación profesional.


Por otra parte, decenas de proyectos de cooperación han sido iniciados y realizados en los dominios prioritarios de la agricultura, agua, electricidad, educación y sanidad.


Los países de la CEDEAO son regularmente comunicados por la compañía « Royal Air Maroc » que en los próximos días abrirá una nueva línea aérea en Cabo Verde, último Estado miembro incorporado.


El partenariado público-privado se ha visto igualmente desarrollado en estos últimos años, y Marruecos figura en la primera fila de los inversores africanos en la subregión. Las inversiones privadas marroquíes cubren ahora dominios variados como pueden ser los bancarios y las finanzas, los seguros, las telecomunicaciones, las infraestructuras, la vivienda y las minas. En el mismo sentido, prometedoras perspectivas se abren en materia de «economía verde» adaptada a los suelos del oeste africano.


Señor Presidente,


Excelencias, Señoras y Señores


Quisiera manifestar mi encarecido deseo de ver pronto a los Estados magrebíes presentarse ante ustedes, unidos, solidarios y comprometidos, para construir con la CEDEAO unas relaciones interregionales fructuosas y orientadas hacia el futuro.


Si a pesar de las dificultades y los obstáculos, los cinco países de la unión del Magreb han podido desarrollar desde hace algún tiempo un diálogo con los cinco países europeos del Mediterráneo occidental, y más allá, con la Unión Europea ¿por qué vacilan todavía para hacer otro tanto con su vecindad inmediata del Sur, con la que tantas cosas comparten, en términos de desafíos y amenazas y sobre todo en términos de fraternidad, potencialidades y proximidades de todo tipo?


Efectivamente, del Norte al Sur, el Magreb y su Sahara, los espacios del gran Sahel y los territorios del oeste africano abiertos sobre el Atlántico, se configura una inmensa zona de crecientes interdependencias, de influencias recíprocas y de seguras complementariedades.


Aunque la naturaleza y el clima hayan configurado de diferente manera estos estratos geográficos sobre los cuales se han construido nuestras naciones, nuestros espacios norte y oeste africanos, lo mismo que nuestros hombres, afrontan desafíos comunes y retos cruzados, a saber, los del desarrollo sostenible, lo mismo que los de la seguridad colectiva, a los que no podemos dar respuestas perennes y óptimas sino conjugando y coordinando los esfuerzos y acciones de todos.


Señor Presidente,


Excelencias, Señoras y Señores,


La aguda crisis que sacude a Malí hermano, es la prueba tajante de la ineficacia verificada a propósito de los enfoques parciales, los planteamientos selectivos e incluso en las respuestas parcelarias, frente a una realidad compleja y multidimensional que amenaza a toda la región.


Por el contrario, esta crisis muestra la pertinencia de la estrategia global y de la acción colectiva, a las que Marruecos no cesa de llamar desde hace bastantes años.


Los grupos armados oscurantistas han explotado, el año pasado, las crecientes fragilidades del Estado maliense, debilitado por las divisiones políticas y las disensiones militares, amparándose de todo el norte del país y sometiendo a su población, en el marco de una compleja madeja de alianzas locales, resentimientos étnicos y de intereses criminales, a “ leyes y reglas” bárbaras, totalmente ajenas a las ancestrales prácticas musulmanes, que a lo largo de los siglos fueron desarrolladas en total armonía dentro de la región.


Sobre la ruta de todos los tráficos transnacionales -de armas, drogas, flujos financieros ilícitos y migraciones -el norte de Mali se convirtió de este modo en una zona de no derecho, verdadero santuario de múltiples grupos terroristas, más o menos autónomos, compuestos de elementos armados de diferentes nacionalidades, cuyos objetivos y designios superan ampliamente el propio territorio maliense.


La importante ofensiva militar llevada a cabo hacia el sur, el 10 enero pasado, no sólo ha constituido un riesgo seguro de desmoronamiento del Estado maliense y de sus fundamentos, sino también una amenaza real para la vecindad y toda la región.


Tal ofensiva representaba igualmente un verdadero desafío lanzado a la Comunidad internacional que, unos días antes, había fijado en la resolución 2085 del Consejo de Seguridad, una estrategia clara y articulada, que permitiría al Estado de Malí hermano recuperar su soberanía nacional e integridad territorial así como restablecer su orden constitucional.


Esta resolución de obligado cumplimiento, emanada del Consejo de Seguridad, y adoptada bajo la presidencia marroquí, confirmaba, por otra parte, que la crisis en Malí representaba una amenaza a la paz y a la seguridad internacionales contra la que todos los Estados miembros estaban llamados a movilizarse.


En este sentido, quisiera felicitar vivamente a la CEDEAO por su pionero compromiso al lado del Malí hermano, así como por su global, justa y pertinente apreciación de la situación, su enérgica movilización a escala internacional y, finalmente, por su capacidad de reaccionar prontamente, a pesar de sus numerosas dificultades logísticas y presupuestarias.    


Vuestros esfuerzos han nutrido la reflexión internacional a la vez que han determinado la posición del Consejo de Seguridad. Vuestra movilización al lado de las fuerzas francesas, malienses y chadianas, ha contribuido a la liberación de los territorios y ciudades del norte de Malí. Asimismo, ha favorecido la aceleración de la puesta en marcha de la resolución 2085, en su triple dimensión, política, securitaria y humanitaria.


Ahora que el arreglo de la crisis maliense ha entrado en una nueva y diferente fase operativa, la CEDEAO se halla animada para continuar sus acciones de mediación, facilitación, protección y estabilización post-conflicto.


En las decisivas y delicadas etapas futuras, las iniciativas de la CEDEAO serán determinantes para acompañar a Malí, país soberano, en la realización de su “Hoja de Ruta para la Transición” y en el cumplimiento de los diferentes objetivos trazados por el Consejo de Seguridad.


De igual modo, vuestro papel será fundamental en la deseada transformación de la MISMA en operación de mantenimiento de la paz de Naciones Unidas, que puede garantizar, bajo un mandato preciso, una estabilidad consolidada en Malí.


Obviamente, la CEDEAO no podrá desempeñar esta misión histórica sin un apoyo político, financiero y logístico consecuente y apropiado.


En este sentido, el Reino de Marruecos seguirá asumiendo plenamente sus responsabilidades a escala bilateral en tanto vecino solidario, así como a escala internacional, como socio para la paz y la seguridad en la región.


Partidario de una respuesta global a una amenaza global, y ferviente defensor del enfoque que preconiza vuestra subregión, Mi país no escatimará esfuerzo alguno en continuar aportando su apoyo al pueblo maliense hermano, en este período particularmente delicado y agitado de su historia. Con ello quiere proseguir su acción multiforme, en estrecha concertación con la CEDEAO y las Naciones Unidas.


Tras haber decidido, en su momento, otorgar una ayuda humanitaria de urgencia para aligerar los sufrimientos de miles de malienses desplazados al Sur o refugiados en Mauritania, Níger o Burkina Faso, quisiera hoy anunciar la próxima instalación en Malí, de un hospital de campaña marroquí, con vocación multidisciplinar, a fin de paliar las insuficiencias en infraestructuras sanitarias, de acuerdo con las acciones similares llevadas a cabo por la MISMA.


En materia de apoyo al desarrollo, el Reino quiere reforzar su tradicional cooperación técnica con Malí, habida cuenta de las apremiantes y nuevas necesidades de este país hermano, en los planos social, económico y de formación.


Con el fin de seguir apoyando los loables esfuerzos desplegados por la CEDEAO, Marruecos aportará su respaldo al necesario proceso de reconciliación nacional en Malí, abierto sobre todas las sensibilidades del país que se comprometen, sin violencia armada y sin condiciones, a respetar la integridad territorial. Más particularmente, desea apoyar, dentro del estricto respeto de la plena soberanía de Malí y de la libre elección de los malienses, los trabajos de la “Comisión Nacional de Diálogo y Reconciliación”, prevista a este efecto.


Efectivamente, reviste una importancia capital la aprobación por todos los actores malienses del modelo por construir, las etapas por atravesar y las modalidades a poner en práctica. Tal aprobación no sólo permitirá superar las crispaciones y contenciosos del pasado, exasperados por los resentimientos y rencores del presente, sino que suscitará igualmente la construcción de una nueva gobernanza nacional, política y territorial, sobre una base apaciguada, sana y perenne, adaptada a las realidades geográficas, económicas y culturales de las diferentes regiones del país.


Finalmente, Marruecos seguirá colocando la situación securitaria de Malí, indisociable para él de aquella que prevalece en toda la región, entre las prioridades de su diplomacia, tanto en las Naciones Unidas como en cualquier otro lugar.


Este mismo enfoque, voluntarista y comprometido, anima la acción de Marruecos con respecto a Guinea Bissau hermana, sometida a una situación política y securitaria fuertemente preocupante, donde mi país sigue, con simpatía, los esfuerzos desplegados por la CEDEAO y decididamente acompaña las iniciativas regionales e internacionales a favor de una transición democrática digna de credibilidad, una consolidación de las instituciones y una estabilización securitaria.


Señor Presidente,


Excelencias, Señoras y Señores,


Marruecos se alegra del camino recorrido por vuestra Comunidad desde su creación en 1975, así como de las pertinentes y progresivas ampliaciones de su mandato.


La CEDEAO constituye, hoy por hoy, un marco federador de las aspiraciones legítimas de los pueblos de la región de África del oeste y un actor privilegiado para sus socios africanos e internacionales.   


En consideración de los progresos constatados y de las ambiciones compartidas, quiero confirmar la voluntad del Reino de Marruecos de profundizar aún más su cooperación con la CEDEAO, ampliando su estatuto de miembro observador a nuevos horizontes, confiriéndole un contenido significativo y singular en los planos político, económico, sociocultural y estratégico.


De este modo, podremos construir, sobre la base de los logros actualmente realizados, un partenariado privilegiado y adecuado, voluntario y solidario, al servicio de nuestros 16 pueblos y de su plena realización, en el seno del progreso y de la estabilidad.


Muchas gracias.


El saludo, la bendición de Dios el Altísimo y  sus gracias, sean con vosotros".